Ya para
que buscar culpables
Si no
fuiste ni tú, ni yo.
Para
que disculpar
Si no
habrá nada que cambiar,
Mientras
no haya amor que florecer.
Para
que olvidar
Si ya
no me recordarás.
Para
que llorar si fui
Un
pasajero con una bella ilusión,
Un
poeta que escribió sin exclamación;
Inspirado
de lo que sucedió
Entre
tú y yo; de la nada por alguna razón.
Para
que volver si fui tu perdición;
La
tormenta que te hizo llorar y a la vez volar,
En la
desolación sin ninguna obligación.
Para
que volver si no hubo comprensión
De mi
acontecer por un nuevo amanecer
No
estando escrito, mucho menos
Preparado
por el suscrito.
Fuiste
sol que ilumino todo a su alrededor,
Y yo un
simple padecer sin nada que prometer.
Tenéis razón
no vale la pena volverme a ver.
Esto lo
traigo en el bagaje
De entre
mi carne y mi agobiada alma sin blindaje.
LBR
“LAPIZ ESCRIBE”