sábado, 8 de agosto de 2015

VISITA CONYUGAL



Cuanto suplica,
Cuanto rogar,
Cuanta humillación
Que aguantar;
Cuanto trámite 
Que realizar,
Cuantas horas que esperar,
Para entrar  en rincón
Un corto rato y pichar;
Sin ni siquiera entre sabanas
Nuestras ansias dejar;
Acompañados 
Y Contra muro
La pasión aflorar;
Ante miradas
Mil pajas 
Se huelen derramar;
De aquellos
Que no les llega 
Su consuelo desquitar.
Cuanta asqueada 
Necesidad que aniquilar,
Por amor o por obligación
O quizás por una que otra 
Conclusión que enfrentar;
Son los amores
Tras las rejas 
Del amor, 
En que he estado yo;
Todo este tiempo
En que tú 
No me lo has dado ni el olor; 
En que tú no me has mirado
Ni para despreciarme;
Así los has querido;
Saborearte lo he soñado:
Pero tu divagar lo he sentido
Y tal vez todo ese amor; 
Que dijiste sentir por mí,
Lo has perdido;
Vaya yo a saber con quién
O supongo quien
Tu antiguo novio
El que no has olvidado
Y con el que te has
Difuminado por doquier; 
Y yo acá en las celdas del amor
Muchas veces he debido
Encontrar mi yo con el otro yo;
Para calmar mi ansiedad
Y mi sed de amor por ti;
Para no desesperar esperando
Tener otra oportunidad 
De tu visita conyugal.
LBR
“LAPIZ ESCRIBE”


2 comentarios:

  1. Barbaridad!!!
    Y los estatutos, normas y demás reglas para éste derecho, no existen?
    Ojalá solo sean letras las que formen éste texto, de lo contrario, me impacta ésta situación.

    ResponderEliminar
  2. Estimada Poeta; podrian haber normas pero la realidad es la humillación en que se dan este tipo de situaciones; desafortunadamente.

    ResponderEliminar

Gracias por tu lectura. El Autor.