MIS ÚLTIMOS INSTANTES

Quien desearía hablar sobre su propia muerte;
Yo diría que apenas unos cuantos;
Es más estoy seguro que muy pocos;
Y que tal vez demasiados,
Ni siquiera lo han pensado;
A quien le importaría leer
Sobre los últimos momentos de otro;
Se podría decir que a unos,
Por mezquino interés
Les causaría intriga;
A otros por un posible aprecio,
O cierto amor,
Les causaría preocupación;
Es más me pregunto
Quién querría leer sobre la muerte?
Será; los que le temen?
O los que tienen  sueños inalcanzables;
Porque la muerte es alcanzable por todos.
Pensaría que solo por curiosidad
Se quiere saber un poco más de la muerte;
Sin lugar a dudas ella vive al asecho
Y en todo momento y en todo trecho;
De la que no se escapa todo ser viviente,
De la que muchos huyen,
Y poco se comparte;
Por la que se llora.
Lo injusto para inocentes;
Para otros la justicia del que la merece;
Por eso todos escriben sobre la felicidad
Sobre el amor;
Sobre su propia felicidad,
Sobre lo que les causa amor,
Pero muy pocos nos atrevemos a describir;
O mejor a escribir sobre nuestros últimos instantes;
Aquellos que nunca se desean que lleguen;
Ni para un ser especial;
Mucho menos para uno mismo;
Ya que es la clausura de todo ser,
El fin de la lucha,
De los sueños,
De todo afán,
De todo interés;
La interrupción de nuestro transitar,
Por este mundo material, superficial y sin esencia
De la existencia de un más allá de la vida;
La eternidad;
Donde nunca mueres,
Donde tu esencia deja huella,
Donde tus palabras y obras recobran vida;
Si todo esto he pensado aquí;
Entre un transcurrir de tiempo sin reloj
Entre pitos de signos
Que dicen que aún tengo vida,
Entre sollozos y lágrimas,
Entre tristezas y silencio,
Heme aquí señor mi Dios;
Abatido por el destino y algún dolor;
Sobre todo el de mi alma;
Por aquellos que veo que me extrañan;
Que me quieren o me aman;
Y aun así;
Me sostiene la tranquilidad
De la resignación;
Por un deber cumplido
En un mundo,
Del que me despido hoy;
De quienes pudieron estar,
Y de los que están en mi pensamiento;
Lo que aún tengo en mi vida,
En aquella vida,
Que comparada con otros seres
De este reino llamado tierra,
Es fugaz;
Como el paso de una estrella.
En estos momentos
En que me voy
De donde ya nada hay que hacer,
Solo espero aquí;
En mi cuerpo,
Que aquel débil e intermitente zumbido,
Se quede en un solo sonar;
Entre el tiempo y el espacio,
Donde ya se empieza
A no sentirse nada,
Pues para mí,
Ya todo es igual;
Todo es paz,
Ya sin fuerzas,
Sin deseos,
Tal vez porque sé,
Que mi deber hoy termina.
Hoy sé con más ahínco,
Que batallas libre;
De las que en franca lid salí
Victorioso confiando en ti;
Mi Señor; oh mi Dios;
Pero hoy sé que todo quedara aquí;
Con un NO vivir
Y un SI para morir;
En este instante,
Donde sin querer,
Mi apabullado cuerpo,
Me permiten escuchar,
Los que están aquí,
Siento tu paz;
Y un respiro por estar junto a ti;
Con los que en un momento conocí
Y hoy los veo ya los veo junto a ti;
Los que un día se alejaron de aquí,
De este mundo,
Del que me alejare
Para no morir;
En las mentes y en las almas,
De los que algún día,
Me amaron sin fingir;
Hoy este instante se termina;
Y mi cuerpo material que queda;
Cuando mi alma es la que se aleja,
Hoy se quienes estuvieron siempre a mi lado
Y quienes fingieron como en obra de teatro
Hoy me entrego a ti,
Para no morir........._____________________________________
LBR.
"LAPIZ ESCRIBE"