POEMA INMORTAL

Será que te podre limpiar de mi memoria
Pues aún ronda en mí el recuerdo de tu inexplicable actuar. 
Tú que con dulce sonrisa y esos labios seductores,
Dejan en mí una estela de desencanto total
Sucumbiéndome en mi sincero amar.
 
No sé cómo a mi espíritu de hombre vagabundo
Un día se adhirió tu alma loca sedienta de libertad; 
Y ahora que mi amor has sentido; tú solo me esquivas,
Cuando a mí me inunda más la desolación
Por tu desagradecido amor.
 
Y aunque calientes labios
Me den ternura en noche de locura 
Ninguno será como los tuyos deseados con amor. 
Fue esos ojos duros inspiración de mis poemas 
Así como los labios tuyos desvelo en mi diario reclinar.
 
Pero ahora son esos ojos mi quebranto y mi tristeza,
Ahora son tus labios un poema de un fatídico final,
He de recordar en estos momentos de tristeza  
Que solo el tiempo borra los recuerdos, Y que se hunde
En el olvido lo que solo fue frialdad en el amor.
 
Podrás comprobar cuando me muera;
Que si te inclinas y luego tocas mi pálido cuerpo,
Sentirás que aun ardo por ti de amor;
Como cuando deslizó por mi culpa
Cálida agua en la ducha después de hacer el amor.
No entiendo por qué si en mi extasiada trayectoria,
Yo que amé a innumerables mujeres 
Con la certeza divina de lograrlas olvidar; 
Es hoy cuando me tortura tus ojos matadores; 
Y que tan solo acato suspirar al escribir este poema inmortal.
 
Que será de mí; por esta tristeza que hay en mis sentidos 
Que por constelación entera he llorado solo por ti;
Como prueba a lo que escribo mis ojos y mi teclado
Aún están humedecidos recordando todo lo sentido
Porque aún el último beso tuyo… palpita en mí.
LBR
“LAPIZ ESCRIBE”